Las estructuras están mantenidas mediante acero abulonado, con escuadras reticuladas, dimensionadas para resistir vientos de dirección perpendicular a los paños instalados. Estas estructuras están sustentadas en bases de hormigón, ancladas según las características del suelo; estas están protegidas por una mano de antióxido y dos manos de esmalte sintético de primera calidad.